Tyrius ha podido constatar la gran demora en los trámites del padrón del Ayuntamiento de Valencia, tanto en lo que se refiere a la inscripción en el padrón de la ciudad, como en la obtención de certificados familiares, certificados éstos que recientemente han dejado de poder ser obtenidos de manera automática desde el sitio web del Ayuntamiento de Valencia, previa solicitud, tal y como ocurre en el caso de los certificados de empadronamiento históricos, según se informa por parte de la entidad como consecuencia de la aplicación de la normativa de protección de datos.
La dificultad tanto para poder empadronarse como para la obtención de determinados certificados de empadronamiento específicos, tales como los denominados colectivos o familiares, generan un importante perjuicio, entre otros, al colectivo de personas migrantes, que necesitan bien tramitar su empadronamiento u obtener el certificado familiar para poder realizar trámites ante las oficinas de extranjería, al ser uno de documentos imprescindibles a aportar ya sea para trámites de residencia como para renovaciones de sus permisos de residencia, y cuya no aportación puede conllevar la denegación de sus permisos de residencia, con las graves consecuencias que de ello se derivan.
Tal situación, que desde Tyrius se denuncia, viene generada tanto por la ausencia de citas previas para dichos trámites, como por la gran demora, de más de dos meses, para su obtención si la solicitud se realiza vía telemática a través de la sede electrónica del Ayuntamiento de Valencia. Asimismo, la solicitud de manera presencial, sin cita previa, conlleva largas colas para la realización de dicho trámite, que en la mayoría de ocasiones finaliza con colas sin la posibilidad de obtener el preciado certificado, dado que vienen a atenderse un número determinado de personas al día.
Ante ello, desde Tyrius se insta al Ayuntamiento de Valencia a adoptar, a la mayor brevedad posible, medidas tales como la habilitación de más puntos en la ciudad de atención y gestión de trámites de padrón, a destinar más medios materiales y humanos para desatascar la situación, así como a la adopción de las medidas necesarias a fin de que la tramitación “online” se haga en un plazo máximo de 7 días, y no se eternicen las solicitudes en el tiempo, todo ello en aras de desatascar colas y demoras.
